jueves, 1 de noviembre de 2012


A la luz de la penumbra

Como una noche tétrica
A la luz de la penumbra
Como una triste agonía
Y la muerte que  me alumbra
La mente solo en tinieblas
Hierve el pudor de la sangre
Escondida esta la luna
Y el sol esta equidistante
El amanecer sepulcral
Alumbrado por luz del sol
El anochecer infernal
Alumbrado  por el seol
Al sonar de las campanas
Al palpitar del corazón
Solo quedan muchas penas
Que viven en mi habitación
Me juzga y  pide la muerte
No vale nada mi vida
He perdido este presente
Tengo tristeza, odio e ira
De mi  cayó una lágrima
Reclamándole a la vida
Con mi entereza abatida
Maldiciendo mis heridas
Sonó un estruendo del cielo
Tal vez bajó quizá un ángel
Miré ya sin miedo alguno
Será mi ángel o mi madre
Un destello en mi corazón
Que brotó con aquella luz
Con las heridas del amor
Dejo este dolo en un ataúd
Mis amores han partido
Ya se encuentran en el cielo
Con esta sangre en mis manos
Partiré al lejano infierno
Coadyuvando cada instante
A la vida que me alumbra
Durante el tiempo se vive
A la luz de la penumbra
E. Soile 

A la luz del umbral


¿Será una luz la realidad?
¿Será solo acaso un sueño?
¿Será una vaga ironía?
¿Será un destino risueño?
Se preguntaba un soñador
Herido por una ilusión
Por sus ideales y honor
Como una gloriosa canción
A el preámbulo de un  umbral
Consciente de la belleza
Que emana mediante un caudal,
Yace la naturaleza
Donde renace el ímpetu
Con aquel hambre incesante
Con un coexistente tabú
Como aquel fuego que arde
La luz guía este  sendero
Siendo semblanzas de ideas
Iniciando y construyendo
La lluvia de disyuntivas
Un hermoso paraíso
Un concepto a la deriva
Una realidad perfecta
Sin pensar en la utopía
Cosechando los éxitos
En busca de la libertad
Alegrías sin anhelos
Viviendo con felicidad
Calculando nuestro infinito
Como resultado el amor
Plasmado en el universo
Lo encontró un pobre soñador
A la  ruta de la vida
Paradoja de un nuevo umbral
A la luz de la realidad
Viajando a la luz del umbral